les enseñé a mis manos
a recorrer de puntilla los laberintos de tu piel,
a acariciar tu rostro,
a perfilar el contorno de tus labios,
les enseñé a entornar tus párpados
para que supieran del asombro,
y a las yemas de mis dedos
que volaran como pluma de cisne
desde tu espalda al infinito
y aprendieron a aprehenderte
a hurgarte a tenerte a agarrarte
y ahora que les pido
que me enseñen a olvidarte
porque estoy en el intento
-de queriendo- no quererte
ellas se niegan a enseñarme.
*beatriz*
a recorrer de puntilla los laberintos de tu piel,
a acariciar tu rostro,
a perfilar el contorno de tus labios,
les enseñé a entornar tus párpados
para que supieran del asombro,
y a las yemas de mis dedos
que volaran como pluma de cisne
desde tu espalda al infinito
y aprendieron a aprehenderte
a hurgarte a tenerte a agarrarte
y ahora que les pido
que me enseñen a olvidarte
porque estoy en el intento
-de queriendo- no quererte
ellas se niegan a enseñarme.
*beatriz*