"Con la palabra se ve lo no visto, o incluso lo no visible"-
EMILIO LLEDÓ. El silencio de la escitura

viernes, 18 de mayo de 2012

MÍMESIS




… y qué será
de tu muerte con mi muerte
de tu sombra vacía de mi esencia
yerta yo
en la fragilidad de tu sudario,
 tras las rejas de mi rostro
tu clausura,
 hacia el viento mi melena
tejiendo telarañas con la ausencia,
y entre violetas escarchadas
tu extravío
abrazado a mi muerte
muriéndose conmigo
y yo muerta ya en ti
muriéndome contigo.
Inseparable al fin
tu muerte de la mía.

Imagen: seleccionada  en Google

23 comentarios:

Maruja dijo...

Hola amiga, un poema un poco triste pero intenso. Me ha encantado esta frase. "Abrazado a mi muerte muriéndose conmigo".Un beso.

Beatriz dijo...

Querida Maruja
La tristeza también es parte de la vida.La muerte, el destierro, el desamor, el desencanto son dolores para el alma, pero a veces de esos dolores aprendemos. Con ellos maduramos para soportar otras embestidas.

En mi poema no se muere en soledad, también muere esa otra con la que también compartimos la vida.Y acaso compartamos el después... ¿quién lo sabe?

Un abrazo y gracias por tu compañía y por transmitirme lo que de mis palabras te emociona.

Rochies dijo...

justo hoy, aunque no lo publiqué aún, escribí sobre esa búsqueda de aquellas otras que fui. Imploro que alguna regrese y me cuente quienes éramos antes de este presente...
la sinastría que nos une es indiscutible, mi amiga querida...
si me lo permites me llevo tu pintura tan elocuente como la magia de tus letras.
mi más grande abrazo!

maria candel dijo...

Amor y muerte, dos instintos por los que nos movemos, por los que nos aferramos a la vida, dos fuerzas que a veces van en la misma dirección
Un gran abrazo, Bea

Beatriz dijo...

Rochies,
(recibido tu" Encuentro" y leído)

Muchas veces me pregunto que es lo que hace que en esta virtualidad en la que nos "des-conocemos" surja de
de pronto la armonía, el hallazgo de la complicidad a través de la palabra. Sombras que siembran emociones y que de repente,no sé por que razón se fusionan, se sienten, se entienden acaso desde la primera letra.
Y a veces hasta se necesitan. Tal vez porque leyéndonos los unos/as a los otros/as nos reconocemos.
Nos sentimos comprendidas
Algunos le llaman empatía, yo me atrevo a pensar que todo es más profundo. Que es algo casi mágico que traspasa y descifra el código de las transferencias. Porque acaso lo que nos acerca, aquello que nos hace reconocibles, nace desde esa magia que tiene la palabra. En su transparencia.
En ese espejo invisible en el que nos reconocemos.
Una distancia que nos hace más auténticas, más creíbles, porque no hay exigencias. La otra que somos se desenmascara, sin engaños y es ayer y después. Entrega. Verdad.

Leeré con detenimiento tú "Reconstrucciones". Se merece una profunda lectura. Aunque admito que lo siento cercano. Demasiado.

Un abrazo amiga ( y lo de la imagen no había ningún inconveniente, pero veo que he llegado tarde con mi respuesta

Beatriz dijo...

María Candel,


Dos ante la misma fragilidad.
Un trayecto compartido de latidos y silencios.

Un beso -

Diana H. dijo...

Justo hoy escuchaba a Dolina (¿lo conocés?) en una de sus charlas y él se refería a la muerte para quienes no tienen la fe como último recurso ante semejante absurdo.
Es una realidad que algo se nos muere cuando algo termina, que vivimos muertes diferentes y en nosotros está el saber sobrevivir a la experiencia. Tu poema, tan certero como crudo, nos deja la pregunta que nos desvela... Y después, ¿qué?
Si bien hay de distinta índole, sospecho que de algunas debe ser muy difícil levantarse...
Un abrazo, amiga.

Javier F. Noya dijo...

la separación como muerte mutua, un sentimiento pocas veces planteado en esta forma de expiar los sentimientos que suele ser un poco umbilical, autoumbilical. Bello poema, me ha gustado. Besos.

Beatriz dijo...

Diana, me gustaría hablar de tus ventanas,(porque me ha sido imposible abrirlas y dejarte mi mensaje) Pero, como siempre me pasa al leerte consigues que mi imaginación vuele.Y a pesar de no poder traspasar esas ventanas sedientas de noches compartidas, veo, un florero con rosas blancas, una cama de hierro antigua ,las sábanas de hilo y la fragancia de una colonia fresca que embriaga e invita a "disfrutar de la vida"
Que el llamador esté siempre visible. Porque estoy segura que habrá algún forastero que descubrirá tus ventanas y presentirá las emociones que la habitan.

En cuanto a mi texto
María Candel define muy bien:"Amor y muerte, dos instintos por lo que nos movemos,..." a lo que yo agrego
también sufrimos por esa fragilidad
que ambos conllevan. Por lo imprevisto e inevitable de su recorrido y de su final.

besos querida amiga,

Te estamos esperando desde ya.

Beatriz dijo...

Javier , acabo de recorrer tu espacio y he visto que coincidimos en el tema.
Gracias por tus palabras, una muy acertada reflexión sobre mi poema. Aunque sabes bien que el juego de las interpretaciones queda como un ejercicio para las sensibilidades de aquellos que nos leen
Y a que a quienes lo hemos escrito nos enriquecen

Un fuerte abrazo de complicidades

Raúl dijo...

Amor y muerte. ¿Acaso no serían la misma cosa?

Pd.- Gracias por los versos de Pizarnik quue me regalaste, Beatriz.

Rochies dijo...

Y hoy recién leo lo que me dejas dicho... y pensaba son letras de colección. Me las guardo.

Relee esto como si no fuese tuyo:

Una distancia que nos hace más auténticas, más creíbles, porque no hay exigencias. La otra que somos se desenmascara, sin engaños y es ayer y después. Entrega. Verdad.

Es tan genuino y real como mágico en las opciones...

Anónimo dijo...

La noción de la muerte, su constante presencia, aunque nos hagamos los distraídos. Benedetti (pensando en el después, si es que hay un después), decía que envidiaba a los creyentes, que por lo menos pensaban que podían ir a un "paraíso" o un "infierno".

Pienso que de una u otra manera quienes hacemos arte, lo hacemos para hacerle una zancadilla a su paciente espera, no sé.

dos cosas más: por un lado, te sigo (pensé que lo hacía desde hace tiempo) y me emocionó tu comentario sobre Santoro, que me conmueve con su obra.

Abrazo grande

Beatriz dijo...

RAUL
Dudas nos quedan siempre y eso es tal vez lo que hace que sigamos palpitando,y que aquellos que gozamos con la escritura busquemos perpetuar con la palabra la finitud de lo que sabemos inevitable.

Un abrazo.

Beatriz dijo...

Rochies,

Eres mi incondicional,
Presentirte es ya para mí saber que somos, que hay un camino en el que nos encontramos. Siempre.Es hacer que las distancias se difuminen. Reconocernos.
Bienvenida sea esta manera virtual que hace que las relaciones surjan sólo reconociéndonos en las emociones que brotan con la magia la palabra.

Acaso sea lo más reconfortante para el alma.

Besos

Un beso y con tu comentario.

Beatriz dijo...

Horacio, siempre que te leo presiento una cercanía en tus textos por cuanto me identifico en sus contenidos. Es esa magia de la escritura que hacen que nos enlacemos y en las que llegamos a descubrir instantes compartidos aún desde las distancias.
Me satisface haberte emocionado. Es una buena recompensa para aquellos que hilvanamos palabras.

Un abrazo

silvia zappia dijo...

hola beatriz, leí tu comentario en el blog de horacio y vine a conocerte.


son bellos tus versos

abrazo*

Beatriz dijo...

Rayuela,

mi madre ponía siempre flores frescas en el jarrón que colocaba sobre un tapete de hilo impecable que cubría un mueble de roble en el recibidor de nuestra casa. "Las visitas tienen que sentirse bien desde que se abren las puertas de la casa", decía ella.

Yo sólo tengo palabras para ofrecer en este "mi lugar" y con ellas intentaré que te emociones, que te sientas bien.

un abrazo

Juan Herrezuelo dijo...

Es el amor constante más allá de la muerte, a un tiempo triste y gozoso: serán ceniza más tendrá sentido. Y esas telarañas que teje la ausencia… La poesía siempre a flor de piel en este espacio de ventanas abiertas y aire fresco y luz.

(Visité la página de Santoro desde el enlace que proponía Horacio, y espero ya la ocasión de citar algunos versos -“Cada vez que hay un problema/el juez levanta el martillo/y el país se hunde/más adentro”, por ejemplo-. A Santoro le venían bien aquellos otros versos que Patxi Andión dedicó a Lorca: “Tú poeta y ellos tantos”..)

Un beso, amiga.

Rochies dijo...

quiero leerla. Ya sé, puedo deleitarme recorriendo esta casa, donde sí se perciben esos jarrones colmados de flores. Un abrazo desde el frío porteño.

Beatriz dijo...

Rochies
de amiga a amiga:
He de confesarte que hace tiempo tengo dolor en el alma. Que acaso de tanto urgar en ella, por ese desmedido deseo de encontrar la palabra, se ha herido y enmudece de pena
Juro que hago lo imposible para que cicatrice pronto esa herida. Porque cuando ella calla también callo callo yo.-
Un beso amiga.Me satisface que me extrañes porque con ello haces que me exija y que mis versos renazcan

Te mereces mis palabras, que aunque a veces sólo sean verbos hilavanados, llevan consigo lo que soy, lo que siento.Lo que vivo. Lo que me emociona

Un beso

Beatriz dijo...

Querido amigo Juan,

Este rincón está repleto de vida, de luz y de incondicionales amigos En ella y junto a ustedes me refugio cuando algo le dice a mi alma que el desaliento llama a las puertas.
Gracias por estar siempre cerca.

Rossina dijo...

Beatriz querida cuando urgamos en el dolor y encontramos la palabra precisa, logramos de esa manera darle forma, podemos sacarlo de donde estaba escondido, y ahora sí trasnsmutado brindarle un nuevo espacio.
La palabra cura. La dicha y la escrita. Y a la escrita, que mata a su autor, verla como tal.
Opino como Umberto Eco, la obra mata a su autor. En muchos de los casos, el dolor mismo.