"Con la palabra se ve lo no visto, o incluso lo no visible"-
EMILIO LLEDÓ. El silencio de la escitura

jueves, 11 de marzo de 2010

DESENCANTO

Foto: http://pacomerloansin.blogspot.com/

Todo fue distinto desde aquella noche en que algo sombrío comenzó a sobrevolar su Edén. Las imágenes del paisaje se fueron diluyendo, los colores ennegreciendo. Los querubines que la protegían emprendieron raudo vuelo. Pidió consejos a los duendes que resistían el dolor, doctos en conjuros milagrosos, para que esa siniestra sombra que borrraba sutilmente el color de sus días y de su vida desapareciera. Y en sus desvelos, con la tenue luz que aún desprendía la luna, humedecía la vejez de su lecho, las nervaduras quebradas de las hojas de su calendario y su piel marchita de ausencias, con jugos afrodisíacos que espantaban traiciones de almas oscuras.
Desafiando hasta el agotamiento a Érebo, improvisó plegarias, guardó un trébol de cuatro hojas entre las páginas de un libro y rezó sin saber hacerlo a cualquier dios y ante cualquier altar para ahuyentar la opacidad de su paraíso..
Y vestida de negro esperó, por siempre.

16 comentarios:

Bowman dijo...

Muy poético, muy sutil, pero expresando perfectamente la realidad del momento.
Me ha encantado.
abrazos

Ricardo Guadalupe dijo...

Su espera, era de esperanza. Érebo nunca la tuvo en sus garras. El Éter puede triunfar gracias a esperanzas como esta.

Desencantada, sí, pero también más sabia.

Un abrazo de luz,
Ricardo

Dante Bertini dijo...

qué desencanto brutal... qué ganas que tengo de echarme a llorar!!!

una nueva ilusión lo cura todo.

un saludo griposo

Francisco Ortiz dijo...

Acaba con una frase magnífica lo que nos capta desde el principio.

Carlos dijo...

EXPLENDIDO. menos mal que siempre, o casí siempre, podemos contar con Hemera para apartar, aún por unos instantes, esa oscuridad.
Un saludo

Diana H. dijo...

Es que es en medio de la oscuridad donde más brillo tiene su espera/esperanza. Y la negrura sólo está en sus ropas, no en su interior.
Un abrazo,amiga.

Beatriz dijo...

J.Carlos.
Esa realidad que no puede ni debe vencer las ganas de seguir, de no decaer, de volver a intentarlo.
Un abrazo y gracias por tus palabras-

Beatriz dijo...

Ricardo,
siempre habrá que intentar encontrar una luz en medio de la oscuridad.
Siempre tener esperanza.
Un saludo y te sigo esperando y leyendo.

Beatriz dijo...

No Dante¡¡ para llorar no!!.
No es mi intención.
Hay tantas tragedias en el mundo por las que sí vale la pena derramar lágrimas y no permanecer indiferentes.
Un beso.

Beatriz dijo...

Francisco,
La última frase, a pesar del negro que decora sólo su cuerpo, es la que demuestra la fuerza, la voluntad, la lucha para esperar que regrese esa luz que le arrebataron.
Siempre agradeceré tus comentarios.

Beatriz dijo...

Carlos,
Ojalá siempre encontremos a Hemera, y la oscuridad que a veces nos sorprende sólo sea la sucesión, el paso a un nuevo día, a nuevas ilusiones.
Un abrazo y sigo "escuchando" la originalidad de tus textos.

Beatriz dijo...

Luzdeana,
creo que no debo agregar nada más a tu comentario. Lo defines con exactitud. Una espera, es esperanza. Es mirar al mañana, es creer en uno mismo y apostar.
Un gran abrazo, amiga.

Raquel Barbieri dijo...

Me uno a lo que dijo Dante, que una nueva ilusión lo cura todo.

Me imaginé la escena y qué cierto es que después de haber estado en un Edén de cielo despejado, una sombra aplastante se apodera de un alma vulnerable, a veces por mucho tiempo hasta poder salir de ese lugar y llegar a esa nueva ilusión redentora.

Hermoso, querida Beatriz.

Besos :)

Beatriz dijo...

Raquel amiga,
Yo también ahora estoy con gripe. Dante, tú y ahora yo. Casualidades verdad?.
En fin que mi cuerpo sólo pide paracetamoles y cariñitos como los que te recomendé a ti en su momento. Gracias por tus palabras.
Y sin sombras, mirando la luz de esta hermosa mañana que va anunciando la primavera, va un beso enorme para ti y Renata.

Anónimo dijo...

Y cuando más tratas de olvidarlo, con más fuerza lo recuerdas.
Tu relato de hoy es tan cercano a la realidad que me ha evocado inquietantes recuerdos.

pd. perdona Beatriz mi anonimato, pero soy principiante en esto de internet y todavía no me animo a abrirme un blog porque no sabría lo que poner. De momento voy aprendiendo desde mi sillón, como lectora y espectadora y de vez en cuando lo que leo hace que deje por escrito las sensaciones que me causa. Gracias
ELVIRA

Beatriz dijo...

Soy muy tajante con esto del anonimato. Existen recursos para entrar, identificarse y dejar comentarios sin que sea imprescindible tener un blog.
De cualquier manera y suponiendo que tu nombre sea Elvira agradezco que desde tu sillon de espectadora la lectura de mis textos te acerquen a tus realidades.