"Con la palabra se ve lo no visto, o incluso lo no visible"-
EMILIO LLEDÓ. El silencio de la escitura

domingo, 13 de noviembre de 2011

SOLEDAD




Soledad
grieta del tiempo
desnudez del silencio
desatino,
fuga de asombro,
desconcierto,
tapia insuperable del hastío
amnesia de los sueños,
                                    vacío
ceguera del destierro
desamparo, desgarro,
ausencia de latidos,
                              olvido.

10 comentarios:

Antonio Tello dijo...

Me gusta mucho porque se acerca (te acercas) cada vez más a lo esencial.

pepa mas gisbert dijo...

La soledad se nutre de memoria que siempre nos desconcierta y normalmente nos entristece.

Carlos dijo...

Soledad, que horrible nombre tienes....

maria candel dijo...

Beatriz,siempre me han llamado la atención, esas flores que pueden crecer entre el asfalto o el cemento, están solas, pero su capacidad de sobrevivencia y su fuerza, impresiona,la soledad muchas veces implica ese proceso de fortalecimiento.

Que gusto leerte, amiga.

Un fuerte abrazo.

Raúl dijo...

Beatriz, tu poesía a veces me abruma. No sé si es que no soy capaz de leerla con los ojos debidos.
Un abrazo.

Diana H. dijo...

La soledad, cuando no es auténtico deseo y necesidad de espacio propio, de silencio sanador, de encuentro profundo con uno mismo, nos deja muy desvalidos. Yo disfruto de mi elección personal de alejarme del ruido y la vorágine alienante. Porque sé que puedo encontrarme en la verdad de aquellos que me importan y amo.
Es bueno percibir la diferencia.
Un abrazo, querida amiga, sé que estás allí.

Diana H. dijo...

Y veo que los versos se te dan cada vez mejor...

Diana H. dijo...

Y veo que los versos se te dan cada vez mejor...

Carlos dijo...

Soledad, mudez del alma.

Beso.

Beatriz dijo...

A TODOS GRACIAS.
En este aprendizaje de la escritura me planteo desafíos. A veces creo, sólo creo, haberlos superado. Otros sólo me queda la constancia de haberlo intentado. Pero en ambos casos tengo la sensación de que esto(el oficio de escribir) es un ejercicio de evaluación continua en el que como la palabra en sí es vida y como tal plantea desafíos indefinidamente, nunca estaré convencida de que he acertado. No obstante mi intención es seguir en el largo proceso del aprendizaje aceptando sus desafíos.

Cuando he escrito de soledad me refiero a esa soledad impuesta ,a ese desierto de vida que no buscamos pero en el que algo o alguien, (a veces nosotros mismos) nos hunde, nos aisla hasta el pensamiento y nos destruye.

La otra soledad, la que elegimos, es un espacio de libertad, en el que podemos decidir, crear, crecer. Vivir. Y que yo reivindico por que la necesito muy a menudo.

De cualquier manera sé que con la compañía (virtual pero no exenta de sinceridad) de todos ustedes nunca podré sentirme sola.

Un abrazo, como siempre, muy afectuoso para todos y cada uno de vosotros